martes, 24 de diciembre de 2013

Homeland, tercera temporada

Dejémoslo claro desde el principio. El nivel de esta tercera, que no última, temporada de "Homeland", no ha alcanzado el de las dos primeras. ¿Quiere decir ésto que haya sido una mala temporada? En absoluto, simplemente que cuando a uno lo han acostumbrado a la excelencia, si el nivel baja se nota con bastante.
Desde el primer momento, comprobamos que la dinámica de la serie había cambiado, a Brody, ahora en el papel del fugitivo más buscado, no lo vemos hasta el cuarto capítulo. Es Carrie la que lleva todo el peso de la serie, en connivencia con Saul, aunque los espectadores no lo sepamos. Pero una variación en el peso de nuestros protagonistas per se no tiene que ser óbice para que decaiga la función.
Sí, el hecho de que el arco argumental vaya dando saltos sin saber muy bien hacia dónde se dirige. El ejemplo más claro de todo esto, lo representa la familia de Brody durante la primera mitad de esta temporada. En la pantalla vemos lo mal que lo están pasando, todo lo que les ha caído encima por culpa del padre de familia, han pasado de héroes a villanos en lo que se tarda en chasquear los dedos. Está bien que nos lo cuenten, siempre y cuando eso implique acciones a posteriori dentro de la trama, algo que aquí no ocurre, simplemente se olvidan de ellos tras pasar unos capítulos. De la nueva aventura de Dana con su noviete, reincidiendo en lo peor de la segunda temporada, mejor no hablamos.
Así que llegados a este punto, podemos decir que la persona que ha manejado los hilos de esta temporada ha sido Saul. Convertido (a su pesar) en el director en funciones de la CIA, tiene una misión entre ceja y ceja, buscar la paz con el enemigo. Para poner en juego su estrategia, y tras la limpieza de personal tras el bombazo en Langley, echará mano de viejos amigos. De su lado, el inquietante y enigmático Dar Adal, que ya despuntaba en la temporada anterior; y por el otro, al despiadado y maquiavélico Majid Javadi (Shaun Toub), el alma tras el atentado en la Agencia.
Además se produce un cambio más que significativo en el desarrollo de la serie. Si anteriormente lo adictivo y excitante eran esos giros imprevistos; ahora todo es más lineal y cobra especial protagonismo la acción pura y dura, acompañada del espectáculo visual, evidente a partir del episodio "horse and wagon", subtitulado de drogata a marine. Esto conlleva a que el juego sucio y el subterfugio entre los distintos bandos que contemplábamos en la pantalla, gire hacia una escena politizada - ahora las altas esferas están al tanto de todo -, donde el pragmatismo prima sobre la especulación y el bien nacional se encuentra por encima de las personas.
Una vez todo finalizado, sólo nos queda esperar para saber qué aventuras nos deparará la próxima temporada, con Carrie como jefa de operaciones en Estambul, a la par que madre soltera.

2 comentarios:

  1. ¡Coincido plenamente contigo! Y te informo de que Carrie o Claire Danes, es una de las productoras de la serie y su relación con Brody o Damian Lewis no ha sido buena en esta última temporada. Al parecer, en los rodajes tuvieron varias discursiones. Me imagino que esta razón es más que suficiente para terminar con su relación. Por otra parte, el guionista de la serie falleció cuando estaba en plena grabación. De ahí que podamos entender los altibajos de esta última temporada.

    Esperemos que en la siguiente temporada, no pueda parar de comer plátanos de la emoción.

    Ikkkk Ikkk!!! :D

    Monito

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  2. Estoy de acuerdo en que el nivel ha bajado. Yo la habría terminado en el búnker ese, haciendo explotar la bomba y cargándome a todo el mundo. Pero claro, ya se sabe, la serie tiene éxito y hay que estirarla y dar un giro tras otro, y así es imposible mantener el nivel. Aun así, tiene mérito lo que hacen.
    Sin embargo, lo que más echo de menos es ver cómo la familia de Brody se va desmoronando. Y a su mujer sobre todo. Por cierto, Monito, ¿para cuándo la próxima platanada? Llámanos...

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