viernes, 23 de septiembre de 2011

Hasta pronto

El grupo norteamericano R.E.M. (acrónimo de rapid eye movement), palabra que sacaron al azar de un diccionario para darse a conocer en un concierto, ha decido separarse.
Peter Buck, Bill Berry, Michael Stipe y Mike Mills
La banda se formó a principio de los 80 en Athens, Georgia, al igual que The B'52, cuando eran universitarios, y fueron junto a Violent Femmes los impulsores de lo que se denominó nuevo rock americano, una mezcla de folk y rock revisada. Con su primer disco y primera obra maestra, "Murmur", mostraron al mundo que canciones crípticas y bellas armonías eran capaces de funcionar al unísono, todo ello desde una compañía independiente como I.R.S., donde sacaron otros tres buenos discos y otra obra maestra, "Lifes rich pageant", recientemente reeditada.
Pero fue con su salto a Warner, cuando sus prestaciones se multiplicaron, tras el excelente "Green", sacaron "Out of time" y con él el sencillo "losing my religion", el mundo se puso a sus pies. A día de hoy no es un disco que me entusiasme, aunque contiene buenas canciones, todo lo contrario que me pasa con el posterior "Automatic for the people", su tercera obra maestra. Cuando lo tenían todo bien atado y se podían dedicar a vivir de sus rentas, editan un disco reposado, sencillo, introspectivo y nada complaciente, dando un paso atrás para dar cinco adelante, una vuelta a los orígenes, pero con diez años de camino recorrido a sus espaldas. A partir de aquí, empeza su declive, Bill Berry deja el grupo antes de que salga el disco "Up", posiblemente su último disco notable, y simplemente se dejan llevar por los acontecimientos hasta hoy.
Además de sus discos, nos han dejados canciones indelebles en la memoria, como "radio free Europe", "talk about the passion", "begin the begin", "fall on me", "it's the end of the world as we know it (and I feel fine)", "world leader pretend", "losing my religion", "man on the moon", "at my most beautiful", "imitation of life", y mi favorita, "nightswimming".



Aún recuerdo cuando fui a verlos con mi amigo Gonzalo al velódromo de Anoeta con la gira de "Monster", una noche que nunca olvidaré.

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